El ingreso discrecional es el dinero que te queda después de cubrir los gastos mensuales necesarios como el alquiler, la alimentación, el transporte o las medicinas. En otras palabras, es el dinero restante después de hacerte cargo de tus facturas. Es posible que estos sean los primeros gastos que pienses reducir si estás pensando en ahorrar dinero.
¿Cómo calcular el ingreso discrecional?
Como acabamos de mencionar, puedes calcular el ingreso discrecional restando tus gastos básicos u obligatorios de los ingresos netos.
Para ayudarte a calcular el ingreso discrecional, existen numerosas calculadoras de ingresos en línea, como Mint, WiseBanyan, Bankrate, Credit Karma y otras. Estas calculadoras te permiten ingresar información sobre tus ingresos y gastos mensuales para obtener un cálculo preciso de tu ingreso discrecional.
¿Cómo afectan los ingresos discrecionales a tu presupuesto?
Los ingresos discrecionales pueden servir como un indicador de tu salud financiera. Si se mantiene un equilibrio saludable después de cubrir las necesidades básicas, puedes invertir, ahorrar y darte algún capricho. Si por el contrario el ingreso discrecional es bajo, necesitarás volver a analizar tu presupuesto.
¿Cuál es la diferencia entre ingresos discrecionales e ingresos disponibles para las empresas?
Los ingresos discrecionales y los ingresos disponibles son dos conceptos financieros diferentes que se usan para describir los flujos de efectivo en una empresa.
Los ingresos discrecionales son aquellos ingresos que una empresa es libre de decidir cómo utilizar, por ejemplo, ingresos de las actividades comerciales. Estos ingresos pueden utilizarse para gastar en bienes o servicios adicionales, para ahorrar o para redistribuir a los accionistas como dividendos. Esto significa que no están limitados por ninguna obligación contractual, y por lo tanto el uso y destino de los fondos es discrecional.
Por otro lado, los ingresos disponibles son aquellos ingresos que la entidad tiene obligación de destinar a un propósito específico. Esto incluye los pagos de intereses o dividendos, los alquileres a pagar, los impuestos a pagar, los salarios, etc., a los cuales los dueños de la empresa necesitan dirigir sus fondos. Estos ingresos están limitados por contratos y acuerdos, y no tienen libertad discrecional para su uso. Los ingresos disponibles pueden ser destinados a la mejora de los activos de la entidad, como la compra de equipos, instalaciones o inversiones, pero el empresario debe cumplir con los compromisos contractuales previos antes de considerar otras actividades.
