Los bancos tradicionales suelen ofrecer una amplia gama de productos financieros, desde cuentas corrientes hasta préstamos e inversiones. Sin embargo, en los últimos años han surgido algunas alternativas a la banca tradicional que debemos tomar en consideración.
Bancos online
Si te domicilian tu nómina y pagas la mayor parte de las facturas y gastos en línea, rara vez necesitarás mantener una cuenta en un banco tradicional. Los bancos online no tienen altos costos inmobiliarios y de personal. Este ahorro se refleja en forma de mejores tasas de interés para los clientes.
Cooperativas de ahorro y crédito
Funcionan como los bancos en muchos sentidos, pero hay una gran diferencia: las cooperativas de ahorro y crédito no tienen fines lucrativos. Esto significa que suelen ofrecer tasas de interés más favorables para cuentas de ahorro y cuentas de crédito en comparación con los bancos. Eso sí, tienen un carácter local o regional.
Prestamistas online
Los prestamistas online ofrecen soluciones rápidas y a veces más económica en comparación con el banco.
A la hora de elegir un prestamista, busca valoraciones y opiniones de otros clientes. Es importante que la entidad del préstamo comunique con total transparencia las condiciones de su servicio. Existen agencias calificadoras que evalúan trimestralmente la fiabilidad y solvencia de los prestamistas.
Conclusión
Fuera de la banca tradicional también existen alternativas y opciones financieras interesantes para satisfacer tus necesidades. No te conformes con tarifas altas y un servicio deficiente. Busca la opción que realmente sirva a tus intereses.